domingo, 22 de noviembre de 2009

ALFARO: LA POESIA VIVA NO ES INVISIBLIZABLE



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Pen drive o cómo cualquier cosa mía
antes o después de G.Trakl es una chorrada
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Se hizo tarde a lo lejos

desde que el mosquito vanguardista
de puntitos blancos sobre sus alas en cruz
atravesó la ventana
y lo gaseé fluflú
voló durante unos segundos
y cayó al suelo
flu flu
flu
(con la musica en cadencia el flu)

supe más tarde
cuando el ojo izquierdo se me volvió rojo
que el mosquito tigre y el fluflú clásico
habían estado esperándome

menos tarde
después de dejar a aquella doctora cotorra de no te acuerdas de mí
amiga del colegio
que sí que me acordé
y salí a la calle convertida en corsaria
o en doblemente pirata
que al parchearme el ojo izquierdo
perdí mi oído derecho
y que ya soy la mismísima iria flavia
del cuento
sin cuento
al lado de mi cervantes

y que veo la mitad del frente frontal
solo mitad de mitad
y el resto
un mundo de sombras blancas
entre fluflús y mosquitos atigresados
en avanzadilla y al acecho.

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Con el ojo izquierdo enrojecido



Por qué tan gris griseando risa tan pasar tú la tarde con nostalgia se acerca el tiempo de derramarse el frío de estrechar y empequeñecer las frases proliferan las elipsis triste quietud la que exige hoy el viento
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Textos de la poeta Alfaro (M. J. Romero), extraidos de La Ciudad Sinnombre
Y en el blog de
Eloísa Otero, quien me visibilizó esta poética suficiente, indómita, desatada, interrogativa, ferazmente oteadora de los mundos en la amplitud de la creación artística desde lo real hacia lo indecible.

Ver: más aquí

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